Otoño 2021 | Su Historia | para los miembros de Centennial Care

www.phs.org/centennialcare 3 la vacunación unos 90 días después de recuperarse ofrece la protección más duradera. P: En las noticias se ha escuchado que algunas personas vacunadas se están contagiando de COVID-19 y estos casos están relacionados con la vacuna de Johnson & Johnson (J&J). ¿Hay algún dato sobre si la vacuna de una dosis es eficaz o si las vacunas de dos dosis son más eficaces, especialmente contra la variante Delta? R: La vacuna de J&J parece ser tan eficaz frente a la variante Delta como las vacunas de dos dosis. En un comunicado de prensa publicado el 1 de julio de 2021, J&J informó que su vacuna tiene una eficacia del 85 por ciento frente a todas las variantes preocupantes, incluida la Delta. P: Se indicó que se ha observado acumulación de líquido alrededor del corazón en varones más jóvenes. ¿Se han notificado casos en mujeres jóvenes? R: Los CDC afirman que la miocarditis/ pericarditis después de la vacunación con ARNm puede afectar a las mujeres en menor número que a los varones. Esta afección suele aparecer unos días después de la segunda dosis de la vacuna, si es que se produce. En general, el riesgo de miocarditis relacionada con la vacuna es muy bajo una semana después de la segunda dosis. Muchas otras afecciones que incluyen infecciones virales también causan miocarditis o pericarditis, ambas muy tratables. P: Si todas estas vacunas han recibido la autorización de EUA por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos, ¿esto no significa que no se han investigado por completo? No conocemos los efectos a largo plazo de estas vacunas creadas con urgencia y ¿cómo podemos confiar en ellas si las personas que las recibieron igual se contagian de COVID-19? R: Las vacunas se probaron en más de 40,000 personas en el ensayo de fase 3, que es la norma para los ensayos de fase 3 de cualquier vacuna. A junio de 2021, más de 177 millones de personas en los EE. UU. habían recibido al menos una dosis de una vacuna contra el COVID-19. La cantidad de efectos secundarios y complicaciones es mucho menor que las complicaciones y las muertes por COVID-19. También sabemos que las infecciones por COVID-19 parecen tener efectos a largo plazo que pueden ser graves. Si le preocupa que el ARNm pueda afectar a su genética, el ARNm no afecta al ADN ni a sus genes y solo dura uno o dos días antes de que se descomponga de forma segura en su organismo, como su propio ARNm. P: ¿Cuál es su opinión sobre la aplicación de la vacuna si alguien ya ha tenido COVID-19? R: Los CDC recomiendan recibir una vacuna contra el COVID-19 dentro de los 90 días posteriores a la recuperación de la infección para extender la inmunidad. P: Hay muchas personas con problemas médicos preexistentes que tienen miedo de vacunarse contra el COVID-19. La mayoría de estas personas tiene diabetes (no controlada), presión arterial alta, insuficiencia cardíaca, etc. ¿Cómo podemos ayudarles a vacunarse? R: La diabetes, la hipertensión y la insuficiencia cardíaca se encuentran entre las afecciones de alto riesgo de hospitalización, complicaciones y muerte por COVID-19. Se ha demostrado que la vacunación es segura y eficaz cuando la persona tiene estas afecciones. El Comité Asesor sobre Prácticas de Vacunación de los CDC ofrece orientación sobre la seguridad y la eficacia de todas las vacunas. Es una fuente válida para obtener más detalles. P: ¿Cómo se compara la inmunidad de la vacuna con la inmunidad natural? ¿Tienen inmunidad las personas que tuvieron COVID-19 y se han recuperado o siguen necesitando vacunarse? Si necesitan vacunarse, ¿por qué? R: Los estudios están demostrando que la inmunidad obtenida por enfermarse de COVID-19 no parece durar tanto como la inmunidad de la vacuna, especialmente en casos leves de COVID-19. Una teoría es que una cantidad menor de virus que causa la enfermedad en el organismo produce una menor respuesta inmunitaria, que quizás no dure tanto tiempo. La mejor manera de protegerse contra la reinfección por COVID-19 es vacunarse unos 90 días después de recuperarse de la enfermedad. Esto ofrece una protección duradera.